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LA PODA DEL MANZANO: CUÁNDO Y CON QUÉ TÉCNICAS

Para poder obtener buenas manzanas cada año, con cosechas constantes en cantidad y calidad, hay que realizar una poda del manzano que sea eficaz.

De hecho, este árbol frutal tiende por naturaleza a alternar la producción entre años ‘cargados’ y años ‘descargados’. Por tanto, hay que intervenir para mitigar la fructificación excesiva o, por el contrario, estimularla. La poda del manzano, muy extendida en muchas variedades, consta de varias técnicas y, a continuación, veremos cómo y cuándo podar el manzano joven y viejo, en las distintas estaciones, en las principales formas de cultivo en volumen (jarrón, huso o husillo, libre) o en espaldera (tipo Guyot, eje columnar) y con cuáles herramientas.

 

La mejor época para podar el manzano

¿Cuándo podar el manzano? El período más adecuado es el invierno. Este árbol no sufre las bajas temperaturas, de hecho, necesita el frío para su descanso vegetativo, por lo que ni siquiera teme demasiado los cortes de poda en receso (o seca). Además, en este período la planta está desprovista de hojas y esto facilita la identificación de las ramas con los mejores cogollos, que hay que conservar, de las que hay que eliminar.

Por tanto, la ventana de poda de invierno es amplia y va desde diciembre hasta finales de febrero y la elección del momento de entrada a los surcos dependerá únicamente del agricultor y de las condiciones climáticas. Si, por el contrario, el huerto no es demasiado grande, o se puede contar con la ayuda de herramientas agrícolas de alto rendimiento, como las fabricadas por Campagnola, o se puede contratar un número suficiente de operadores para poder completar la poda en poco tiempo, entonces es preferible intervenir solo a finales de febrero, para intentar retrasar al máximo el despertar vegetativo. Es cierto, de hecho, que el manzano no teme el frío, pero también es cierto que sufre mucho las heladas de finales de primavera, especialmente después de que se abren las flores.

 

Menos manzanas, pero más grandes y sabrosas: la importancia del aclareo

Si con la poda de invierno (véase también el otro artículo específico sobre la poda marrón) se eliminan principalmente los esquejes y chupones, las ramas dañadas y/o enfermas, y se establece el método de cultivo, con la poda en verde de verano se aclara la vegetación en exceso estimulada por la poda anterior (por lo que es una buena regla no cortar demasiado), dando así una mejor iluminación al follaje y reduciendo o eliminando el riesgo de autosombreamiento.

Se realiza sobre todo el aclareo de los frutos pequeños para contrarrestar la tendencia a la alternancia en la producción de manzanas. Se interviene inmediatamente después del cuajado, cuando los frutos todavía tienen entre 10 y 15 mm de diámetro, para obtener una manzana por inflorescencia (corimbo).

Con unas buenas tijeras afiladas -como los modelos S2 (manual de doble corte), STAR30 (neumática), SPEEDY o SL23 (con batería enchufable) de Campagnola- se eliminan los frutos pequeños, dejando un par por corimbo, pero también teniendo cuidado de dejar intacta buena parte del pedúnculo, para evitar que los frutos restantes caigan debido a la herida producida por el corte.

Junto con el aclareo, la mejor calidad de las manzanas, de gran tamaño y sabrosas, se consigue favoreciendo también de forma equilibrada la producción de frutos en lamburdas (ramas frutales muy pequeñas), en brindillas (pequeñas ramas) y en ramas mixtas (vigor medio) y renovando las mismas ramas fructíferas mediante podas al brote y verdes.

Un aspecto que no debe subestimarse es el foliar: al mismo tiempo que se aclara el número de frutos pequeños, son necesarias las hojas de la inflorescencia, pero la poda debe garantizar que cada fruto tenga un buen número de hojas para que puedan acumular las reservas de azúcares necesarias.

 

¿Cuáles son los principales criterios de poda que hay que respetar?

Al entrar en el huerto (véase también un artículo en profundidad sobre la poda de árboles frutales) se puede tener en cuenta un pequeño esquema de poda de manzanos con los principales criterios válidos que se aplican a todas las variedades de las que, en realidad, hay muchas gracias a los cruces y a los numerosos portainjertos, ya que la planta es una de las más cultivadas en el mundo, pues se adapta a diferentes condiciones climáticas y de suelo, aunque prefiere el ambiente montañoso.

De hecho, las variaciones de temperatura entre la noche y el día hacen que las manzanas sean más coloridas y crujientes: este es también uno de los secretos de por qué nos gusta tanto esta fruta, que podemos comer durante todo el año.

– El manzano tiene como característica una fuerte dominancia apical; por lo tanto, cada rama debe terminar con una única punta, la más alta, y deben eliminarse las puntas que compitan con el cogollo dominante.

– Se controla la altura de la planta y/o la longitud de las ramas mediante cortes de retorno, respetando obviamente el collar de la corteza.

– Se debe evitar el acortamiento, ya que la planta reacciona con un rebrote vegetativo y, además, en los frutales de pepita como el manzano, las ramas terminan en una única yema frutal apical (mixta).

– En la poda, los cortes siempre deben ser inclinados, para evitar el estancamiento del agua de lluvia o la humedad pero, en el caso del manzano, los cortes también deben ser inclinados hacia y por encima de una yema, dejando el margen de una pequeña porción de madera.

– Las ramas deben tener una sección triangular (excepto en formas particulares de cultivo) que se estrecha hacia las puntas.

– A la hora de podar el manzano también deben adoptarse técnicas como la flexión o curvatura (con ligaduras), la inclinación o extensión (con ligaduras especiales o separadores).

– Después de un cierto número de podas es aconsejable volver a afilar las cuchillas y cadenas, para que los cortes sean siempre limpios y precisos.

– Es recomendable desinfectar siempre las herramientas de poda entre un árbol y otro, especialmente después de haber eliminado alguna rama enferma, incluso en la misma planta, antes de realizar el siguiente corte con la misma cuchilla o cadena.

– En presencia de árboles afectados por enfermedades o atacados por parásitos, siempre es aconsejable eliminar las ramas producidas por la poda lejos del huerto o quemarlas, para reducir el riesgo de nuevas infestaciones.

 

Algunas formas de cultivo del manzano

Desde el momento de la plantación de las plántulas jóvenes de manzano, pasan de 3 a 4 años antes de que la planta adquiera la forma de cultivo definitiva y deseada por el agricultor a través de diversas intervenciones de poda.

La elección del método de cultivo depende de varios factores: la variedad del manzano, el tipo de portainjerto, la calidad del suelo en el que se realiza el trasplante y el tipo de producción que se desea obtener (familiar, intensivo o muy intensivo).

Entre las formas de cultivo en volumen se encuentra la ‘libre’ con poda larga (taille longue), maceta baja o husillo (spindel). Entre las formas de cultivo en espaldera se encuentran una del tipo Guyot y otra con eje columnar.

 

La poda larga (taille longue) del manzano

El manzano se considera la planta más adecuada para la poda larga. Esta técnica consiste en dejar la planta con mucha libertad de crecimiento, con pocas intervenciones para limitar la fructificación excesiva y evitar la alternancia de la producción.

Se aclaran los frutos, se eliminan las lamburdas más internas y poco productivas, se eliminan de las ramas las renovaciones cercanas a las copas y se aclara la vegetación del interior del árbol para mejorar la distribución de la luz.

Se excluyen los acortamientos y los recortes de retorno. El control sobre el crecimiento de las ramas lo ejerce la yema terminal (que también da fruto) y la propia fructificación: el peso de los frutos hace que la rama larga se doble hacia abajo, favoreciendo la diferenciación floral de las yemas dorsales.

 

La poda del manzano en maceta baja

La forma tradicional del manzano es la de maceta baja, que es más manejable desde el suelo y entra en producción antes que la de maceta alta. El tallo permanece a unos 50 cm del suelo y desde él se ramifican 3 o 4 ramas principales con varias ramas secundarias. El follaje aparece equilibrado y agradable a la vista.

La forma de maceta baja está en desuso en plantaciones intensivas, ya que no es demasiado adecuada para la mecanización. Sin embargo, es más adecuada para huertos con plantaciones de al menos 5×4 m de ancho, para huertos pequeños y en zonas montañosas, o para jardines privados.

 

La poda del manzano spindel

El fuseto es uno de los más utilizados en la melicultura comercial, incluso en plantaciones muy intensivas, a pesar de ser una forma de cultivo en volumen, aunque reducida. Garantiza una buena exposición a la luz y facilita la recolección.

Tiene un eje central de hasta 2,5-3 m de altura con ramas, ramillas y brindillas laterales de mayor tamaño y longitud en la parte inferior y más cortas en la parte superior. Tanto el eje central como el palco de las 3-4 ramas laterales, dispuestas en espiral a 40-80 cm del suelo, deben adoptar una forma cónica. Las ramas tendrán una cima ascendente limitada por el corte de retorno. Y precisamente con el corte de retorno, justo después del primer año de cultivo, la parte superior del plantón se desviará un año en una dirección y el siguiente en la dirección opuesta.

En el sistema de cultivo de fuseto, la gran densidad de la plantación es posible gracias al uso de un portainjerto «enano«. El inconveniente es que el sistema radicular queda bastante contenido, por lo que será necesario seguir regando las plantas durante la plena producción.

 

La poda del manzano en espaldera

El cultivo en espaldera también se adopta en el cultivo del manzano para permitir una mayor mecanización, y requiere una poda más cuidadosa y rigurosa.

En particular, se adopta una técnica similar a la Guyot del ‘doble revés’ utilizada en el cultivo de la vid. A aproximadamente medio metro del suelo, se corta el plantón central y se doblan dos ramas para que crezcan horizontalmente en dirección opuesta.

En esta forma de cultivo hay que crear un andamio con postes y alambres, que actúe como soporte para las dos ramas laterales a través de las ligaduras. En cada rama crecerán verticalmente 2-3 ramas mixtas con brindillas y lamburdas que producirán frutos junto con las puntas de las propias ramas, dejándose libres para crecer hacia arriba en la parte terminal y recuperar la dominancia apical.

Otra forma de cultivo en espaldera es la de eje columnar, perfectamente vertical y superintensiva gracias a una fuerte mecanización. Se puede considerar una evolución del cultivo de palma plana, también llamado cultivo de pared, utilizado para otras plantas.

 

La poda de producción del manzano

La poda de producción del manzano depende principalmente de la variedad a la que pertenece la planta. La diferencia sustancial es en qué ramas (y de qué año) se producen predominantemente las manzanas. Existen cuatro grupos varietales, que requieren diferentes cortes de poda.

La Renetta, por ejemplo, es la más representativa de las variedades de Tipo II, que fructifican principalmente en lamburdas de ramas con muchos años y requieren una poda «larga». Otra manzana muy popular y conocida, la Golden Delicious, pertenece al Tipo III, que incluye variedades que fructifican en lamburdas, brindillas y ramas mixtas y se adaptan fácilmente a diversas formas de poda.

Otra clasificación se basa en la tendencia de las variedades para producir en lamburdas (espolón) con una subdivisión en grupo estándar (Golden Delicious, Fuji, Gala, Granny Smith), grupo semiespolón (Braeburn, Early Red One, Goldrush y Gold Chief) y espolón (Red Chief).

 

Una curiosidad: ¡la manzana no es la verdadera fruta!

Desde el punto de vista botánico, la manzana (o pomo) es una ‘fruta falsa’. De hecho, estamos acostumbrados a considerar la pulpa situada entre la piel y el corazón como la fruta del manzano. En cambio, el agrandado del ‘receptáculo’ floral, como se llama la parte pulposa que comemos, no es una fruta, ya que la verdadera es el corazón, puesto que contiene las semillas.

 

La poda del manzano de flor ornamental

El manzano de flor (Malus Red Sentinel) es un híbrido de origen neozelandés. Se trata de un manzano en toda regla, sus frutos son comestibles, pero en miniatura. Por ello, se cultiva únicamente con fines ornamentales. También se puede plantar en maceta en la terraza ya que, al igual que el manzano «grande», no teme el frío invernal.

En primavera tiene una floración abundante con cogollos rosados ​​y posteriores flores blancas. En verano, se forman pequeños frutos de unos 2,5 cm de diámetro en racimos, que luego cambian de un color naranja inicial a un rojo brillante cuando maduran en otoño.

No es necesario podar el manzano de flor, salvo eliminar las ramas secas o dañadas en invierno. Puede dejarse libre para que crezca.

Las herramientas Campagnola más adecuadas para la poda del manzano

Una vez finalizada la fase de cultivo, pasado el tercer año de edad, el manzano se convierte en un árbol totalmente desarrollado. Por tanto, en la poda de producción o de reforma (si es necesario rejuvenecer las plantas, o hacer que recuperen su forma de cultivo), además de las tijeras, se necesitan herramientas capaces de cortar ramas de mayor diámetro.

Son especialmente útiles las herramientas manuales como el serrucho de hoja fija S30 o el cortaramas de corte de guillotina curvo S21.

Los prácticos podadores eléctricos de cadena (con batería enchufable) T-CAT M y T-FOX permiten cortar ramas de 8 y 10 cm de diámetro respectivamente.

Los árboles más viejos tienen ramas más gruesas y altas, por lo que es necesaria una herramienta como el podador eléctrico de cadena T-REX montado sobre una alargadora telescópica (160-240 o 250-300 cm) para podar con total seguridad hasta 21 cm de diámetro manteniendo los pies firmemente apoyados en el suelo. La tijera eléctrica con batería enchufables STARK L o la tijera neumática VICTORY también puede montarse en una alargadora telescópica.

Entre las herramientas neumáticas destacamos también el podador de cadena LASER con espada carving 8» y el podador de cadena LINX con la misma espada para alargadora, que permiten sesiones de trabajo más intensas y largas y son válidas sustitutas de las motosierras para ramas de hasta 20 cm de diámetro, ya que no transmiten vibraciones y no emiten gases de escape. Por último, destacamos el cortaramas neumático STAR 50 y la versión F/6 U con hoja de gancho, que engancha la rama que se va a cortar.

Para obtener más información sobre las herramientas Campagnola, puede consultar el catálogo online, utilizar la sección de contacto de este sitio o contactar con la red oficial de distribuidores locales, donde podrá ver y adquirir nuestras herramientas, accesorios y repuestos.

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